El proceso de “Due Diligence” para la adquisición de inmuebles es una revisión minuciosa que se lleva a cabo antes de comprar una propiedad. Este proceso abarca varios aspectos esenciales¹²:

  • 1. Confirmación de Propiedad: Se confirma la titularidad de la propiedad, asegurando que el vendedor tiene la autoridad legal para vender la propiedad y que no hay reclamaciones o disputas contradictorias.

  • 2. Inspección Física: Se lleva a cabo una inspección física de la propiedad para evaluar su estado, identificando las reparaciones, el mantenimiento o las actualizaciones necesarias.

  • 3. Revisión de Documentos Legales: Se revisan todos los documentos legales asociados con la propiedad, incluyendo títulos de propiedad, permisos, planos de construcción y contratos.

Due Diligence para la compra de inmuebles

  • 4. Evaluación Financiera: Se evalúa la situación financiera de la propiedad, incluyendo los impuestos pendientes, los pagos de servicios públicos y las responsabilidades potenciales.

  • 5. Cumplimiento de Normativas: Se verifica que la propiedad cumpla con las leyes, regulaciones, permisos y códigos de construcción locales¹.

  • 6. Factores Ambientales: Se evalúa el estado ambiental de la propiedad, incluyendo los riesgos asociados con los desastres naturales, la contaminación o los peligros ambientales.

En resumen, el “Due Diligence” es un proceso completo que ayuda a los compradores a tomar decisiones informadas y evitar sorpresas indeseables en el proceso de compra.